Palabras sin sentido que esconden la verdad, cual asesino que trata de escapar, huyendo del destino sabe que pagara, del mismo modo, hoy pago mi delito para contigo.
Tu corazón intentar robar y con palabras de amor tus sentimientos secuestrar, puedes estar tranquila, el jurado ya delibero y acusado de amarte culpable me encontró, como castigo tu indiferencia me ha condenado a una vida en tu prisión, así pues pagare esta condena que tu corazón me imputo y en la cárcel de tu olvido me ahogare con mi dolor.
De Santiago Jesus Ramiro Mejia.